Cuando vi estas botas con flecos hace unos meses lo primero que pensé fue que las podría combinar con todo. Claro, la típica lógica que una utiliza cuando está comprando zapatos. Sin embargo, cuando regresé de viaje (compré las botas cuando fui a Brasil en mis vacaciones de verano) las pobres quedaron guardadas en el olvido esperando la ocasión perfecta para ver la luz del día y caminar por las calles limeñas. Estoy segura que en alguna revista o libro de moda leí que las botas con flecos son fáciles de combinar, pero el día que decidí llevarme este par solo pensé en lo linda que se me veían puestas en ese momento. Fue ahí que me di cuenta que no tenía idea cómo combinarlas, las matemáticas y fundamentos de la moda me habían fallado. ¿O es que no estaba lo suficientemente inspirada para armar el outfit perfecto? 

Creo que me dejé llevar por el vacío creativo que me dio hace unos días, en realidad las botas con flecos son perfectas para looks bohos y folk y me parece que ésta fue la razón de mi falta de inspiración. Mi estilo, el Pink Chick style, es todo menos boho o folk. Pero bueno, no me dejé llevar por esto y como me encanta tomar retos y enfrentar los paradigmas de la moda, me decidí y me puse una meta: armar cinco tenidas con estas hermosas botas con flecos o de lo contrario, acabarán en las manos de alguna de mis queridas lectoras (una de ustedes) en una próxima adición a mi Venta Secreta. Ya estoy en la búsqueda implacable de inspiración en Pinterest, por lo pronto ya vi que si hay una regla que debo seguir es usar las botas con flecos con skinny jeans, vestidos o faldas sencillos ya que éstos tienen que ser (si o si) el ítem más llamativo de todo el conjunto. 

Así que sigue atenta al blog, que pronto te mostraré un nuevo look con este par de botas negras que por cierto, compré en Schtuz de Rio de Janeiro (imagino que te estás preguntando dónde las encontré). Prometo que en mi próximo recorrido por centros comerciales buscaré opciones locales. 

Fotos: 

Junior Rodriguez