Miren qué lindo lo nuevo que acaba de entrar a mi clóset, algo que me hacía falta y que no me había percatado hasta que las vi: unas zapatillas de caña alta rosadas, perfectas para recibir el sol que empieza a salir por mi ventana y que promete quedarse por unos meses más. (¿Se nota que me emociona el verano, no?)
¡Nos vemos más tarde!